La Cofradía Penitencial Nuestro Padre Jesús Atado a la Columna fue la primera de Medina del Campo en poseer de Sede Social, ubicada en el número 66 de la calle San Lázaro.

La idea de la construcción de la sede, nació de una auténtica necesidad. Durante muchos años, las carrozas donde se montaban los tres pasos que procesionan el Viernes Santo, se guardaban en la Iglesia de San Martín, desde que esta se cerró al culto.

En el año 1985 un grupo de vándalos entró en la referida iglesia y destrozó por completo una de las carrozas, dañando también las otras dos. Ante esta situación y temiendo que de nuevo sucediese algo parecido, y dado que en la iglesia de Santiago era imposible tenerlas por no haber espacio suficiente, se mantuvo una conversación con el Señor Alcalde de la Villa para solicitarle algún local donde poder guardarlas, pero el único sitio que pudo ceder fue el desolladero de la plaza de toros, de donde debían de sacarse cada vez que había algún festejo. Dado que ello suponía una gran incomodidad, se buscaron nuevas soluciones, logrando que unos cofrades pudieran ceder provisionalmente un local. En el año 1989 se tuvieron problemas de nuevo, ya que el referido local era muy viejo y una de las paredes se derrumbó, dañando las carrozas. La situación cada vez era más difícil y había que guardar y mantener las carrozas como se podía, afectándolas el agua cada vez que llovía.

A todo este problema, había que unir el que se tenía con los ensayos de la Banda, que tenían que hacerlos en el callejón de la plaza de toros, ya que tampoco había otro sitio mejor, con la correspondiente incomodidad y con el frío que los componentes tenían que soportar.

En el mes de noviembre de 1989 se mantiene una conversación con el párroco don Jaime de la Fuente para preguntarle por la posibilidad de que la Parroquia pudiera ceder a la Cofradía un solar propiedad de la misma. No hubo problema alguno ya que el solar fue cedido en su día a la Parroquia para destinarlo a algún fin social, por lo que desde ese mismo momento se pudo disponer de él para construir el local.

En un principio la idea era construir solamente una cochera, pero al dirigirnos al Ayuntamiento para pedir la licencia, nos indicaron que existía la posibilidad de construir planta baja y una segunda planta, por lo que finalmente nos decantamos por esta segunda opción.

El proyecto de la obra fue llevado por don Arturo Nieto Bayón y debido a que los medios económicos eran escasos, en un principio solo se llevó a cabo la planta baja. El 23 de junio de 1990 comenzaron por parte de unos pocos cofrades las excavaciones de las zanjas para la cimentación, a base de picos, palas y una gran carga de ilusión. Seguidamente y gracias a una hormigonera prestada por don Luis Sánchez Olivares, se realizó la cimentación, terminándose el 28 de julio de ese mismo año. El 15 de octubre se comenzaron a levantar las paredes por parte de los alumnos de un curso de albañilería del INEM, con quien se habían hecho gestiones anteriormente para que ello fuera posible, estando trabajando hasta el día 14 de noviembre, dejando hecha gran parte de las paredes. A partir de ahí, el cofrade don Filomeno Martín Manzano con la colaboración de don Ángel Gutiérrez San Segundo y con la ayuda de unos cuantos cofrades terminaron la obra.

Tras casi dos años de obras, se inauguró el 12 de febrero de 1992 la planta baja, contando con una gran actuación de ilusionismo a cargo de Luna Mágica, de Valladolid, así como la actuación de la Rondalla Medinense, siendo ambas totalmente desinteresadas. El 15 de diciembre de 2001 se inauguró la segunda planta, construida también con la colaboración de los cofrades. Con esta ampliación se completaba el proyecto iniciado hace casi 10 años con la apertura de la primera planta del local. La ampliación del local comenzó a gestarse en 1999, cuando se cubrió el tejado del edificio. Después de la Semana Santa de 2001, una empresa constructora llevó a cabo los trabajos de cerramiento de paredes exteriores del segundo piso y a continuación, un grupo de cofrades se encargó, de forma desinteresada, del trabajo de acondicionamiento interior del local: paredes interiores, pintura, aislamiento y fontanería. El acto de inauguración contó con la actuación de diversos miembros de la Tertulia Flamenca Medinense, así como la Rondalla de Medina. Un grupo de jóvenes cofrades de la hermandad participó con la puesta en escena de una pequeña comedia teatral.

Cuenta con una superficie de unos 90 metros cuadrados a los que han de sumarse otros 20 destinados a cochera. En la planta baja se sitúa el servicio, se guardan las carrozas y se destina también a los ensayos de percusión. En la planta superior se han ubicado las oficinas de la cofradía, en las cuales se desarrollan las reuniones que cada lunes mantienen los miembros de la junta directiva de la hermandad. También en este primer piso se celebran los Cabildos Generales, así como los ensayos de viento y los generales por su aislamiento.

Desde que en julio de 1990 comenzara a cimentarse la sede social de esta cofradía, los miembros de la hermandad han ido sufragando los gastos de la construcción del local por dos vías principales: los ingresos por cuotas de los cofrades y los beneficios por la venta de lotería navideña. Nunca se ha contado con ningún tipo de subvención y todos los gastos derivados del mantenimiento de la sede y de impuestos son pagados por la cofradía.

La sede social se ha convertido en uno de los principales logros de esta cofradía. A día de hoy, no deja de tener actividad durante todo el año, lo cual nos alegra ya que con esa idea se construyó. Pero también se necesita que entre todos la mantengamos aseada, es por eso que  desde finales de 2012 se organizan grupos de limpieza. Actualmente hay 3 grupos, cada uno de los cuales va una vez al mes y limpia la planta que ese mes le corresponda.