La bellísima talla de Nuestro Padre Jesús Atado a la Columna, titular de nuestra cofradía, fue identificada como una de las obras que realizó el jesuita Domingo Beltrán de Otazu (Vitoria, 1535-1590) entre 1563 y 1565 (Siglo XVI) para la Iglesia de Santiago el Real (originariamente el templo del colegio noviciado de  San Pedro y San Pablo de la Compañía).

En esta talla de estilo manierista se puede apreciar un logrado movimiento. La cabeza, con gran dignidad, se levanta e inclina hacia atrás tensando la cuerda que le ata el cuello y las manos a la columna. Sus piernas ligeramente dobladas, obligan al cuerpo a abrazar el fuste para no perder el equilibrio, captándose con gran realismo la sensación de fuerza en el apoyo. El vuelo del paño de pureza y la tensión de su majestuosa musculatura, reflejan perfectamente el instante que se quiere representar.

En la peana se puede leer una inscripción en latín que reproduce un versículo de Isaías en el que profetiza la flagelación: “CORPUS MEVM DEDI PERCVTIENTIBUS ESA 50” (Ofrecí la espalda a los que me golpeaban, Isaías 50).

Ha sido puesto como ejemplo en exposiciones y conferencias, al ser una de las más destacadas tallas castellanas de la segunda mitad del siglo XVI. Sorprende que la columna supera en altura a la figura de Cristo, no es habitual encontrarnos con esta característica debido a que desde finales del siglo XVI se impuso un tipo de columna baja, cuyo modelo se tomó de la columna de la Iglesia de Santa Práxedes de Roma, a la que se tenía como la original de la Pasión.

Este Cristo flagelado fue concebido como imagen de retablo, y en 1635, cuando los jesuitas decidieron construir los retablos-relicarios del transepto de la Iglesia, reservaron los lugares de presidencia para la Virgen con el Niño en el lado de la Epístola y para el Atado a la Columna en el del lado del Evangelio.

Se tiene constancia, gracias al libro de actas de la Cofradía, de que esta talla procesionó por primera vez en un Vía Crucis durante la Santa Misión de abril de 1943 y ese mismo año fue acompañado por los feligreses de la parroquia en la Semana Santa. A raíz de estas salidas, en el mes de mayo se constituyó nuestra Cofradía, y en la semana de pasión de 1944 se instauró la procesión de Caridad, siendo esta imagen protagonista de la misma hasta que fue sustituida por el Santísimo Cristo de la Agonía, años más tarde. Cabe destacar que en las décadas de los 50 y 70 era escoltado por una sección de la Guardia Civil con traje de gala en la procesión del Silencio, en la tarde del Viernes Santo.

La obra ha figurado en diversas exposiciones: en 1987 en “Escultura del siglo XVI en Castilla y León”, Museo Nacional de Escultura de Valladolid; en 2005 en Varón de Dolores organizada por la Junta de Castilla y León, Diputación de Valladolid y Junta de Semana Santa de Valladolid, momento en que fue limpiada bajo la supervisión de la restauradora Carmen de Santamaría.

En julio de 2006 comenzó la restauración de la imagen, afectada por xilófagos que principalmente habían dañado la columna y empezaban a hacerlo a la imagen. Se realizó en la misma Iglesia y fue llevada a cabo por Consuelo Valverde Larrosa, dentro del convenio firmado por la Junta de Semana Santa de Medina y la Junta de Castilla y León. Dicha reparación finalizó a tiempo para el Encuentro Nacional de Cofradías celebrado en el mes de Septiembre de ese año.

Durante los meses de enero y febrero de 2009 formó parte de otra muestra de arte sacro, la exposición “Damnatus”, organizada por la Junta de Cofradías de la capital vallisoletana en la Sala de Exposiciones de las Francesas, en Valladolid. Y en 2011 fue una de la obras de la exposición “Passio” de la Fundación “Las Edades del Hombre”, debido a que la Iglesia Parroquial de Santiago el Real fue la sede medinense de dicha muestra.

Desde la Semana Santa de 2005, procesiona sobre una magnífica carroza con tallas renacentistas realizada artesanalmente en madera de nogal español por el maestro tallista D. Luís Hernández Hernández con el montaje del maestro ebanista D. Luciano Piñero López.

Con motivo del VI Centenario de las procesiones de disciplina más antiguas de España, la Junta Local de Semana Santa organizó una Magna Procesión Extraordinaria el 9 de Abril de 2011. En ella participó nuestro paso titular junto al resto de pasos titulares de las cofradías. Ese día salió desde la Colegiata debido a las obras con motivo de la exposición de las Edades del Hombre, algo que nunca había sucedido.

En la Semana Santa de 2013 se reincorporó Nuestro Padre Jesús Atado a la Columna a la procesión de Caridad, en la noche del Jueves Santo, completando de forma inmejorable esta procesión. Desde 1944, desfila en la tarde del Viernes Santo en la procesión del Silencio en la que participan todas las cofradías de la Villa.